Kanazawa: guía completa para la ciudad samurái de Japón

Kanazawa es de esos lugares que sorprenden porque lo tiene todo: historia samurái, barrios de geishas, arte contemporáneo y una gastronomía que te deja con ganas de repetir. A diferencia de otras ciudades japonesas más saturadas, aquí todavía puedes caminar sin agobios y disfrutar de un ritmo más pausado. Está a medio camino entre Tokio, Kioto y los Alpes Japoneses, lo que la convierte en una parada estratégica para muchos itinerarios y en una alternativa perfecta si buscas algo distinto a las rutas clásicas.
Lo interesante de Kanazawa es la variedad en distancias cortas: en un mismo día puedes pasear por un barrio de samuráis, entrar en un museo futurista y terminar cenando un bol de arroz con pescado fresco en el mercado. Y todo sin perderte en un laberinto de trenes.
Qué ver en Kanazawa: imprescindibles para tu viaje
Jardín Kenrokuen
Considerado uno de los tres jardines más bellos de Japón, Kenrokuen cambia con cada estación y es el lugar que mejor resume la esencia de Kanazawa. En primavera se llena de cerezos, en verano los estanques se rodean de lirios, en otoño los arces enrojecen como si el jardín ardiera en colores, y en invierno aparecen las famosas cuerdas yukitsuri que sostienen las ramas de los pinos para que no se rompan bajo la nieve.
Lo práctico: abre todos los días desde primera hora de la mañana, la entrada cuesta unos pocos cientos de yenes y puedes recorrerlo en 1–2 horas sin prisa. Al amanecer suele estar casi vacío, mientras que por la tarde se llena más. Si viajas en invierno, ve con calzado cómodo y preparado para zonas húmedas.
Consejo Japonal: compra un té caliente en las máquinas expendedoras que hay cerca de la entrada y llévatelo al paseo. Sentarte frente al estanque principal con tu lata humeante en la mano tiene más encanto que cualquier postal.


Castillo de Kanazawa
Justo al lado del Kenrokuen se alza el Castillo de Kanazawa. No tiene la silueta majestuosa del de Himeji ni la fama del de Matsumoto, pero ahí está precisamente su atractivo: fue reconstruido en madera con un detalle sorprendente, algo poco habitual en Japón donde muchas reconstrucciones se hacen en hormigón.
La visita es muy cómoda porque los espacios están abiertos y se puede caminar por las murallas y torres, algunas accesibles por dentro. Las salas muestran la estructura original, con enormes vigas de madera encajadas sin clavos.
Un consejo práctico: combina la entrada con el jardín Kenrokuen, ya que están a pocos pasos y se pueden visitar en la misma mañana. Y si te gusta la fotografía, sube a los miradores de las murallas al atardecer; la luz naranja sobre los tejados blancos de tejas kawara es un espectáculo muy fotogénico.
A día de hoy está prohibido llevarlo a la práctica, pero si viajas con niños, imaginad cómo sería defender el castillo lanzando flechas desde las ranuras de observación.


Barrio samurái Nagamachi
En Nagamachi todavía se conservan las residencias de antiguos samuráis que sirvieron al clan Maeda. Las calles son estrechas, con muros de barro y canales que en su día transportaban agua. Algunas casas, como la Nomura-ke, permiten entrar y ver armaduras originales, jardines interiores en miniatura y utensilios que formaban parte de la vida diaria de esta clase guerrera.
La zona está a 15 minutos a pie del castillo, así que encaja perfecto en una misma ruta. La entrada a las casas ronda unos cientos de yenes y no se tarda más de 30 minutos en cada una. Si quieres evitar multitudes, la mañana es ideal.
Consejo Japonal: Merece la pena llévarse un snack de konbini y sentarse en un banco del barrio y simplemente disfrutar del ambiente.


Distritos de geishas Higashi Chaya y Kazue-machi
Los distritos de geishas son la otra cara histórica de Kanazawa. Higashi Chaya es el más famoso: casas de té restauradas, escaparates con dulces de oro comestible y la posibilidad de entrar en una ochaya (casa de geishas) para ver cómo eran por dentro. Con suerte, podrás escuchar shamisen en directo o ver a alguna aprendiz cruzar la calle.
Kazue-machi, más pequeño y menos turístico, está pegado al río Asano. Por la noche, con los faroles reflejados en el agua, tiene una atmósfera tranquila y muy fotogénica.
Consejo Japonal: llega al atardecer, cuando las luces se encienden y aún hay suficiente claridad para hacer fotos. Y si quieres probar algo diferente, pide un matcha con oro en alguna de las cafeterías de Higashi Chaya: suena excéntrico, pero aquí es casi un ritual.


Experiencias únicas en Kanazawa
Mercado de Omicho
El Mercado de Omicho es el estómago de Kanazawa. Aquí los locales vienen a hacer la compra diaria desde hace más de 280 años y los viajeros encuentran uno de los mejores lugares para probar pescado fresco del Mar de Japón.
Lo imprescindible es pedir un kaisen-don, un bol de arroz coronado con sashimi variado que puede incluir cangrejo, atún, calamar o huevas de salmón, según la temporada. Los precios suelen rondar entre 1.500 y 3.000 yenes, y la calidad compite con restaurantes de categoría.
Es mejor llegar temprano, sobre las 10 de la mañana, cuando el mercado está animado pero aún no está abarrotado. Si prefieres evitar esperas para comer, muchos puestos ofrecen bandejas listas para llevar que puedes disfrutar en las zonas habilitadas.
Consejo Japonal: atrévete a probar el kani miso (la pasta cremosa que se saca del caparazón del cangrejo). No suena glamuroso, pero es un sabor local muy valorado.

Arte contemporáneo en el Museo del Siglo XXI
El Museo de Arte Contemporáneo del Siglo XXI de Kanazawa es uno de los espacios más originales de la ciudad. Su arquitectura circular y transparente está pensada para que entres por cualquier lado, casi como si no hubiera puertas. Dentro encontrarás instalaciones modernas, exposiciones temporales que cambian cada pocos meses y piezas que invitan a interactuar, tocar o incluso perderte dentro de ellas.
La estrella permanente es la piscina de Leandro Erlich, una obra que parece una piscina real pero en la que los visitantes pueden entrar "debajo del agua" sin mojarse. Es uno de esos lugares donde la cámara del móvil se convierte en parte de la experiencia.
Consejo Japonal: la entrada general al museo es gratuita, aunque algunas exposiciones especiales son de pago. Reserva al menos una hora, más si eres de los que disfruta en museos sin mirar el reloj.

Artesanía local: el oro de Kanazawa y la cerámica Kutani
Kanazawa brilla, literalmente, gracias a su pan de oro. La ciudad produce casi el 99% del oro en láminas de todo Japón, así que no te sorprendas si lo ves en helados, pasteles o incluso flotando en tu taza de café. Más allá de lo anecdótico, la experiencia más interesante es visitar un taller donde puedes probar a aplicar estas láminas en objetos como cuencos o cajas lacadas. Es un recuerdo único, mucho más personal que comprar un imán de nevera.
La otra gran artesanía es la cerámica Kutani, reconocida por sus colores intensos y diseños detallados. Encontrarás desde piezas tradicionales hasta versiones modernas que encajan perfectamente en una mesa actual. Es fácil perder la noción del tiempo en las tiendas especializadas, comparando estilos y precios.
Consejo Japonal: probar un helado con pan de oro es una de esas cosas que parecen postureo, pero aquí está totalmente normalizado.

Dónde dormir en Kanazawa: alojamientos con encanto
Ryokan tradicionales para una experiencia auténtica
Si quieres vivir el verdadero Japón, una noche en un ryokan de Kanazawa es la mejor opción. Dormir en futón sobre tatami, disfrutar de una cena kaiseki servida en la habitación y terminar el día con un baño en el ofuro no es solo alojamiento, es parte del viaje. Muchos ryokan incluyen yukata (kimono ligero) para pasear por el hotel y desayunos japoneses que sorprenden hasta a los más reacios al pescado por la mañana.
Hoteles modernos cerca de la estación
Para quienes priorizan comodidad y logística, la zona de la estación de Kanazawa está llena de hoteles modernos, desde cadenas internacionales hasta alojamientos japoneses de gama media con excelente relación calidad-precio. Lo mejor es que desde aquí salen los autobuses circulares que llevan a los principales puntos turísticos, lo que facilita mucho las rutas de 1 o 2 días


Qué comer en Kanazawa: del sushi al kaiseki
Platos típicos que no puedes perderte
Kanazawa tiene fama de ciudad gourmet y no es casualidad: la cercanía al Mar de Japón y la tradición de cocina refinada de los samuráis dejaron huella. Estos son algunos platos que merece la pena buscar:
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Jibuni: guiso de pato con verduras y gluten de trigo (fu). Es suave y reconfortante, muy típico en invierno, aunque lo encontrarás en restaurantes tradicionales todo el año.
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Kaisen-don: el bol de arroz con sashimi fresco que nunca falla. Aquí suele incluir cangrejo, un producto estrella de la región.
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Oden: estofado de nabos, huevo, konjac y pescado procesado, que se sirve en caldos calientes. En Kanazawa se prepara con un toque más ligero que en otras zonas, ideal para noches frías.
Consejo Japonal: muchos restaurantes ofrecen menús fijos (teishoku) con estos platos, lo que es perfecto para probar varias cosas sin perderte en una carta interminable.
Restaurantes recomendados por locales
Muchos viajeros se quedan en los izakaya cercanos a la estación, perfectos para una cena rápida con cerveza fría y platos para compartir. Son ruidosos, animados y una buena opción si acabas de llegar en tren y no quieres complicarte.
Pero si buscas una experiencia más especial, merece la pena perderse un poco por las calles cercanas al Mercado de Omicho. Allí encontrarás restaurantes familiares donde sirven menús de temporada con pescado fresco, mariscos locales y especialidades como el jibuni. El ambiente suele ser más íntimo y la atención más personal.
Consejo Japonal: en Japón no es raro que algunos restaurantes tengan solo unas pocas mesas. Llegar pronto (sobre las 18:00) es la mejor estrategia para evitar esperas. Y si tienes dudas, fíjate en los locales que tienen colas de japoneses en la puerta. Es el termómetro más fiable de calidad. Y si no te atreves a entrar porque no entiendes el menú, lánzate y pide el "osusume" (recomendación del chef). Normalmente acabarás probando algo que nunca habrías elegido por tu cuenta.
Cómo llegar a Kanazawa desde Tokio, Kioto u Osaka
La forma más rápida y cómoda es el Hokuriku Shinkansen, que conecta Tokio con Kanazawa en unas 2 horas y media. Los trenes salen con mucha frecuencia desde la estación de Tokio, así que no hace falta reservar con meses de antelación, aunque en temporada alta conviene asegurar asiento.
Desde Kioto u Osaka, lo habitual es tomar un tren Limited Express Thunderbird, que tarda entre 2 y 3 horas. Estos trenes no son bala, pero ofrecen buen confort y vistas del lago Biwa durante el trayecto.
Consejo Japonal: si tienes el Japan Rail Pass o el pase de trenes regional que te recomendaremos en función de tu viaje, estos trayectos están cubiertos, lo que te permite ahorrar bastante.

Consejos prácticos para viajar a Kanazawa
Mejor época para visitar la ciudad
Primavera (abril–mayo) y otoño (octubre–noviembre) son las favoritas: el jardín Kenrokuen se ve en su mejor momento y el clima es agradable para caminar. Dicho esto, el invierno tiene un encanto especial. La nieve cubriendo los pinos del jardín y las calles del barrio samurái parece sacada de una postal, y además hay menos turistas. El verano es caluroso y húmedo, pero compensa con festivales locales y productos de temporada en el mercado.

Cómo moverse en autobús o a pie
La mayoría de puntos turísticos están relativamente cerca entre sí y se pueden enlazar caminando. Aun así, existe un pase de bus circular (Kanazawa Loop Bus) que conecta los principales atractivos. Cuesta poco más que dos trayectos normales y lo amortizas fácilmente en un día de visitas.
Consejo Japonal: compra el pase en la estación. Para trayectos cortos, caminar suele ser incluso más rápido que esperar al siguiente bus.
Rutas recomendadas para 1, 2 o 3 días
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1 día: céntrate en lo esencial que es Kenrokuen, Castillo de Kanazawa y el distrito de geishas Higashi Chaya.
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2 días: puedes añadir el barrio samurái Nagamachi y el Mercado de Omicho para una visión más completa.
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3 días: suma una excursión a Shirakawa-go o Takayama, destinos cercanos que encajan perfectamente en un viaje desde Kanazawa.

Excursiones desde Kanazawa: destinos cercanos
Shirakawago y sus casas gassho-zukuri
A solo una hora en bus desde Kanazawa está Shirakawago, famoso por sus casas de techos de paja en forma de triángulo (gassho-zukuri). No es casualidad que sea Patrimonio de la Humanidad: estas construcciones se diseñaron para soportar la nieve acumulada en invierno y siguen habitadas hoy en día.
En invierno, con las casas cubiertas de nieve y las chimeneas soltando humo, parece un decorado de película. En verano, en cambio, los arrozales verdes que rodean las casas cambian la foto por completo.
Consejo Japonal: los buses a Shirakawa-go se llenan rápido, así que reserva billetes con antelación, sobre todo si viajas en fin de semana o en temporada alta.

Los Alpes Japoneses y Takayama
Takayama, a unas 2 horas en bus desde Kanazawa, es conocida como la "pequeña Kioto" por su casco histórico lleno de casas de madera, calles estrechas y sake breweries. Aquí lo mejor es pasear sin prisa, entrar en alguna destilería para una cata y probar el famoso Hida beef, rival directo de la carne de Kobe.
Además, Takayama es la puerta de entrada a los Alpes Japoneses, con rutas de montaña ideales si viajas en primavera o verano.
Ten cuidado: si pruebas el Hida beef, cuidado: corres el riesgo de volver a casa y que cualquier otro filete te parezca aburrido para siempre.


Viaja como un experto
Viajar a Kanazawa puede ser tan simple como seguir un mapa… o tan especial como vivirlo con la seguridad de que cada detalle está pensado para ti. En Japonal llevamos años diseñando rutas por Japón y sabemos cómo transformar un itinerario en una experiencia para toda la vida. Porque cuando tienes la seguridad de que todo está bajo control, el viaje se disfruta mucho más.
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Preguntas frecuentes
¿Cuántos días necesito para visitar Kanazawa?
Con un día puedes recorrer los puntos principales como el jardín Kenrokuen, el castillo y el distrito de geishas. Con dos días tendrás tiempo para explorar Nagamachi y el mercado Omicho. Y con tres días, lo ideal es añadir una excursión a Shirakawa-go o Takayama.
¿Cuál es la mejor época para viajar a Kanazawa?
Primavera y otoño son las estaciones más recomendadas por el clima y los colores del jardín Kenrokuen. En invierno, la ciudad nevada tiene un ambiente muy especial y es temporada de cangrejo, uno de sus platos estrella.
¿Merece la pena ir a Kanazawa desde Tokio o Kioto?
Sí. Desde Tokio el tren bala tarda unas 2 horas y media, y desde Kioto u Osaka unas 2–3 horas en tren limitado. Es una escapada perfecta si buscas un destino distinto a las rutas más típicas.
¿Dónde alojarse en Kanazawa: ryokan o hotel?
Si quieres una experiencia auténtica, dormir en un ryokan con cena kaiseki y baño japonés es la mejor opción. Si prefieres comodidad y rapidez en los traslados, los hoteles de la zona de la estación son muy prácticos.
¿Qué comer en Kanazawa que no encuentre en otras ciudades?
El kaisen-don con pescado del Mar de Japón, el guiso de pato jibuni y el oden local son los imprescindibles. Además, aquí puedes probar helado con pan de oro, un capricho curioso que solo encontrarás en Kanazawa.
¿Cómo moverme por Kanazawa de forma fácil?
La ciudad es muy accesible a pie, pero también tienes el Kanazawa Loop Bus, que conecta todos los atractivos turísticos y es ideal para itinerarios de un día.
¿Se puede visitar Shirakawa-go desde Kanazawa en un día?
Sí. Hay autobuses directos que tardan alrededor de una hora. Es una de las excursiones más populares y conviene reservar billete con antelación porque suele llenarse, sobre todo en invierno.